En una Unión Europea, han surgido nuevas oportunidades para los corredores de seguros y se les han impuesto obligaciones adicionales. El corredor de seguros debe ahora preparar varias ofertas comparativas de distintas compañías de seguros y crear así transparencia y posibilidades de comparación para el cliente.
El nuevo corredor de seguros europeo puede y debe esforzarse por encontrar las opciones más interesantes para sus clientes en toda Europa. Por ejemplo, la planificación de la vida posterior suele desempeñar un papel decisivo para los clientes. Así, por ejemplo, debe tenerse en cuenta si un asegurado desea regresar a su país de origen en la vejez. A una edad avanzada y con cualquier enfermedad preexistente, resulta entonces difícil contratar un seguro de enfermedad óptimo en el país de origen. En la Europa actual, los requisitos asociados pueden planificarse mucho mejor desde el principio y resolverse en beneficio a largo plazo de los asegurados.
Sin embargo, la mayor transparencia de Europa también obliga a los corredores de seguros actuales a hacer frente a una mayor competencia. Colegas extranjeros altamente cualificados se unen ahora a los competidores locales. Esta evolución y el ritmo acelerado de los cambios tecnológicos exigen una gran vigilancia por parte de los corredores de seguros para ofrecer a sus clientes el mejor servicio posible.